POLÍTICAS PÚBLICAS DEPORTIVAS EN EL FUTURO
Época de elecciones, tiempos de buenas intenciones y promesas por doquier que en la mayoría de ocasiones se disuelven como un azucarillo y caen eternamente en el olvido.
Es tiempo de pedir o por lo menos proponer, ciertos gobernantes deberían reflexionar sobre la responsabilidad que sus políticas públicas tienen para diversos sectores del deporte, y como en los últimos años han gestionado esos pocos recursos de los que han dispuesto para desarrollarlas.
La Constitución de 1978 permitió a los poderes públicos intervenir en el deporte, se dice en su art.43.3 que debe fomentarse la práctica del deporte para reportar al ser humano bienestar y salud además de ser generador de esperanza.
El Estado puede intervenir en el mundo del deporte a través de la organización y promoción de eventos deportivos, construcción de instalaciones, programas deportivos, fomentar la creación de entidades, formación, subvenciones etc.
Debemos partir del punto justo en el cuál nos encontramos actualmente, y es que la larga crisis que ha asolado a nuestro país durante los últimos años ha limitado el margen de maniobra de los poderes públicos en cuanto inversión en deporte, el cuál en épocas de vacas flacas no es considerado como algo primordial para la mayoría de la sociedad.
No obstante, estos últimos años gloriosos del deporte español, son consecuencia de una serie de políticas públicas que tuvieron punto de partida los Juegos Olímpicos de Barcelona 92.
Las Becas ADO de ayuda a deportistas olímpicos,la mejora de instalaciones desde la base, ayudas económicas para el desarrollo y creación de nuevas federaciones son algunas de las políticas llevados por el CSD que han permitido un desarrollo importantísimo del deporte en nuestro país, y que lamentablemente en los últimos tiempos se ha perdido por la situación del mismo.
¿Que políticas públicas deben acometerse en la actualidad por parte de los poderes públicos?
Creo que estamos en el mejor momento en la historia de nuestro deporte y sería un drama dejar pasar esta oportunidad.
Ahora los niños quieren ser tenistas gracias a Rafa Nadal, baloncestistas por los hermanos Gasol o nadadores por Mireia Belmonte, entre muchos otros. Proyectar los valores que transmiten estos deportistas, no solo el deportivo, debe ser el primer paso de las nuevas políticas públicas. Seguir fomentando la formación desde la base, inculcar valores y todo ello acorde con unas instalaciones dignas donde los más pequeños puedan desarrollar sus cualidades.
Es el momento de seguir apostando por el deporte desde abajo, apoyar federaciones menos “mediáticas” y relanzar el deporte femenino, necesitamos inversión en el deporte modesto.
Los grandes clubes de fútbol, con el negocio que mueven hoy en día a su alrededor, deben ser autosuficientes y autogestionarse, y en el momento actual, el dinero de Ayuntamientos,Diputaciones o Gobiernos autonómicos debe invertirse a medio plazo en sectores emergentes y deporte base que nos reporte logros el día de mañana.
Primordial la organización de eventos deportivos internacionales en nuestro país, hay que seguir apostando por intentar traer unos Juegos Olímpicos, aunque muchos se empeñen en lo contrario , traen prosperidad al país, y organizados coherentemente beneficios al mismo.
Más becas y ayudas para la formación deportiva en todas sus vertientes, la demanda es muy alta pero lamentablemente no está al alcance de todo el mundo.
Incentivar desde los poderes públicos el patrocinio privado, reformar la Ley de Mecenazgo y permitir que las inversiones de patrocinio por parte de empresas o personas físicas en clubes y otras entidades deportivas otorguen también ventajas fiscales.
Apunten señores políticos.